Caldos recomendados en dietas hipocalóricas, para consumir antes de las comidas. Utilizados para condimentar ensaladas, carnes rojas, pescados, aves, papas, pastas, arroz, etc. Ideal para reemplazar el caldo en cubos, por no poseer colesterol ni saborizantes. Se puede utilizar en seco espolvoreando sobre comidas.
Caldo de verdura: caldo instantáneo de verdura granulada deshidratada. Combina las propiedades de ocho vegetales para lograr un agradable sabor, destacándose el apio, puerro y zapallo.
Caldos de carne y gallina: caldos instantáneos, desgrasados y deshidratados, concentrados bajas calorías. No contienen colorantes artificiales, saborizantes artificiales, grasas trans (colesterol) ni grasas saturadas. Es caldo no saborizador (elaborado con extracto de carne). Lapso de actitud preferentemente 24 meses, conservar en lugar seco y fresco.